En Molina de Aragón hace frío en invierno. Recientemente volvíamos a ser noticia por registrar la mínima nacional, como si eso fuera un prodigio de la naturaleza, o algo peor, una especie de maldición del mercurio molinés que se empeña en dar la mínima siempre.
Personalmente, no deja de sorprenderme: Año tras año observo cómo compañeros de distintos canales de televisión se acercan a nuestras tierras para grabar el frío. Emergen de esas furgonetas revestidas con el logotipo de la cadena en cuestión, a la caza del paisano de turno en mangas de camisa haciendo alarde de valentía.
Y sigo sin entenderlo, porque el frío no se puede grabar y porque cuando estudiaba la carrera de Periodismo me enseñaron eso de lo insólito de las noticias y, sinceramente, que haga frío en Molina de Aragón, pues qué queréis que os diga: No es noticia.
Noticia sería si en pleno invierno y mientras el resto del territorio español se congela, nosotros estuviéramos tan campantes a 23 grados.
Noticia fue cuando los mercurios registraron esos -28,2 grados allá por el 28 de enero de 1952. De hecho es la temperatura más baja registrada en Castilla-La Mancha, no en España, porque el mismo día en Calamocha los termómetros llegaron a marcar los -30.
Insólito fue que en un mismo día, un 8 de febrero de 1981, en el observatorio de Molina de Aragón se encontraran con una amplitud térmica de 29,4 grados, es decir, ese mismo día se alcanzó una máxima de 19,2 grados y una mínima de -10,2 grados.
Ciertamente, si se está un poco atento al termómetro del ambulatorio, todos los inviernos nos encontramos con una mínima de dos dígitos, así que estos -9,8 que nos pretenden vender como una ola de frío siberiano casi inconcebible, pues como que me saben a poco.
Mucha gente de la comarca habla de la influencia negativa del parte meteorológico en lo que se refiere a los negocios turísticos. La verdad es que siempre he percibido como algo positivo, el hecho de que se nos nombre y que se sepa que existimos, aunque sea sólo para manifestar la obviedad de que hace frío en invierno. Yo estoy convencida de que crisis y oportunidad son las dos caras de una misma moneda. Es posible que haya gente que cancele sus reservas cuando se anuncia una ola de frío, pero quizá pueda existir un público interesado en disfrutar de la proeza de vivir un -19 grados, por ejemplo.
Además, todos sabemos que el frío de las Parameras es extremadamente seco, así que si hace frío, se saca a relucir el abrigo, la bufanda y los guantes y apañado.
Luisma
15 Ene 2019Un cafelito calentito calentito un buen fuego y a esperar a que llegue la primavera…
Abrígate bien y no te me constipes un saludo
Andrés
23 Sep 2020No es lamentable comprobar que Molina de Aragón o de los caballeros o del rey, o de sus caciques, no es noticia más que por sus bajas temperaturas?, ¿Porque nunca es noticia?, ¿porque no es protagonista ni de su propia historia?, ¿porque hace tiempo que nadie levanta la voz?, ¿No es desde la conquista vaticana s más que ruina y decadencia? , Cada vez que una cadena de televisión visita la localidad para convertir en noticia lo evidente, ¿no se están riendo en la cara de la miseria cultural? , y de la insolvencia discursiva, de la falta de desarrollo y del gobierno que la legitima.?