La edición digital de El País encendía la mecha y la noticia ha corrido como la pólvora en todos los medios de comunicación: Un monje agustino que cumplió condena de tres años de prisión por abusar de tres menores de entre 11 y 12 años en la escolanía del Monasterio de “El Escorial”, donde ejercía como profesor, fue nombrado párroco de 24 pueblos del Señorío de Molina y sus alrededores
La noticia se recibía con sorpresa y asombro entre los vecinos de la comarca que desconocían el pasado del párroco e inmediatamente la Diócesis de Sigüenza-Guadalajara lanzaba un comunicado en el que explicó que el sacerdote fue acogido temporalmente en una zona rural de la provincia “ante la petición del Superior Provincial de la Congregación y el deseo expreso del interesado, teniendo en cuenta la dignidad de toda persona, la capacidad de su reinserción pastoral y la presencia de su anciana madre en Guadalajara (…) comprometiéndose firmemente a tener especial cuidado en la relación con los menores”. Asimismo, en dicho comunicado manifestaba su compromiso con la erradicación de los posibles delitos de pederastia cometidos por sacerdotes o por otros agentes de pastoral.
La Diócesis de Sigüenza-Guadalajara ha puesto de manifiesto que el monje agustino que responde a las iniciales C.G.H., ha cumplido su condena penal, así como la impuesta por el proceso canónico seguido por esta causa. “el Obispo de la diócesis, asumió la responsabilidad de acompañarle durante su estancia en la misma, y de velar paternalmente por su persona, llevándose a cabo un seguimiento minucioso de su actividad para garantizar su recto comportamiento, pudiendo manifestar que en este momento, el P. Celso está perfectamente integrado con los hermanos sacerdotes y con los miembros de las comunidades parroquiales que lo han acogido con afecto sincero”.
Tal y como publica el País, el sacerdote fue nombrado párroco en octubre de 2015 de seis localidades: Mazarete, Anchuela del Campo, Anquela del Ducado, Establés, Tobillos y Turmiel y en julio de 2016, se ampliaban sus competencias, para ser párroco “in solidum” (junto a otros sacerdotes) de Aldehuela, Anchuela del Pedregal, Anquela del Pedregal, Aragoncillo, Canales de Molina, Castellar de la Muela, Chera, Herrería, Otilla, Pradilla, Prados Redondos, Rillo de Gallo, Selas, Tordelpalo, Torrecuadrada de Molina, Torremocha del Pinar y Torremochuela. Además, fue designado vicario parroquial en las iglesias de Santa María La Mayor de San Gil y de San Martín, en Molina de Aragón, donde también es capellán del Monasterio de las Clarisas.